Árbitro: José Molina
Victoria: Orlin Vallecillo, Félix Crisanto, Ninrrol Medina, Jaime Rosales, Víctor Mena (Luis Jaramillo 43), Víctor Ortiz (Yermy Hernández 46), Rigoberto Padilla, Carlos Padilla, Erick Andino, Elmer Zelaya (Wilmer Crisanto 61) y Mauricio Copete. Héctor Vargas (DT).
Olimpia: Donis Escober, Bryan Beckeles, Fábio de Souza, Johnny Palacios, Juan Carlos García (Fredixon Elvir 75), Miguel Castillo, Óscar Boniek García, Reynaldo Tilguath (Néstor Martínez 63), Óscar Bonilla (Carlos Will Mejía 55), Ramiro Bruschi y Juan Ramón Mejía. Danilo Tosello (DT).
Goles: Padilla 36 (1–0), F. Crisanto 90+1 (2–0)
Amonestados: No hubo.
Rojas: No hubo.
04/04/2012 – Con nueve puntos en juego y siete de diferencia sobre Platense quedó el Victoria al derrotar a Olimpia por marcador de 2–0 en juego reprogramado de la segunda jornada y que se disputó en el marco del verano de La Ceiba. Rigoberto Padilla y Félix Crisanto anotaron los goles de la "jaiba".
04/04/2012 – Con nueve puntos en juego y siete de diferencia sobre Platense quedó el Victoria al derrotar a Olimpia por marcador de 2–0 en juego reprogramado de la segunda jornada y que se disputó en el marco del verano de La Ceiba. Rigoberto Padilla y Félix Crisanto anotaron los goles de la "jaiba".
Héctor Vargas salió con un planteamiento
muy atrevido, tres defensas y sin laterales, un sistema que a Edwin
Pavón con el Choloma solo le costó diez minutos para meterle dos goles
pero dicho sistema fue suficiente para bloquear al equipo olimpista que
salió al terreno de juego.
A los 38' fue Rigoberto Padilla, quien
prendió de cabeza un centro que flotaba sobre el área blanca, él se
levantó más que nadie y logró batir por primera vez a Escober. Un justo
premio para un Victoria que se atrevió y un merecido castigo para un
Olimpia que se escondió.
El Olimpia no pudo reaccionar en la
segunda mitad, Victoria cerraba filas y apostaba a los contraataques.
Cuando ya estaba a punto de jugarse el tiempo de descuento se "fue la
luz" en una de las torres del estadio pero aun así José Gaspar Molina decidió
que se terminara el partido, algo que ya estaba para los jaibos.
Un minuto después se vino uno de los
mejores goles del campeonato, el defensor Félix Crisanto cabalgó desde
su propia cancha cuerpeando con cualquiera que se le pusiera al lado,
llegando frente al área dejó acostado de una finta a Johnny Palacios
quedando solo frente a Escober y con un toque bajo y a la izquierda puso
a los Victoria a celebrar y a sacar del armario sus camisas para
lucirlas con la sensación de haberse salvado.
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